Al entrar en una de las semanas más poderosas y populares del año, la energía vibra con el poder de los 72 Nombres de Dios. Este aspecto de la astrología kabbalística mejora nuestra conexión espiritual durante este tiempo. Esto es apenas un precalentamiento para la energía entrante.
Tenemos uno de los aspectos más importantes del año: los nodos lunares cambian de eje, por lo que el Nodo Norte entra en Piscis y el Nodo Sur entra en Virgo. Esto representa una forma completamente nueva de pensar, ser y conectarnos con nuestra alma. A nivel colectivo, esto significa un año de cambios masivos. Los temas obsoletos desaparecen rápidamente y surgen tendencias nuevas y emocionantes. Muchas personas dejarán de lado sistemas de creencias que han sostenido por mucho tiempo y darán la bienvenida a otros nuevos.
Piscis representa el compartir altruista y encontrar nuestro verdadero propósito. La salida del Nodo Norte de Aries al entrar en Piscis nos llevará a una encrucijada. Ya no podemos seguir por el mismo camino. Tenemos que cambiar de rumbo. Ha terminado el período de enfocarnos en nosotros mismos o en “quién tiene razón o quién está equivocado”. Se avecinan diferentes tipos de entendimientos y soluciones. Con el Nodo Norte en Piscis, la realidad tal y como la conocemos ya no es la respuesta. En cambio, buscaremos algo más profundo, algo más significativo. Podríamos sentir un llamado del alma para redescubrirnos a nosotros mismos de nuevo.
Los nodos pasan dieciocho meses en un par de signos, concentrándose en los “asuntos pendientes” o en los aprendizajes que deben abordarse dentro de esos signos. El Nodo Norte amplifica; nos eleva y nos impulsa hacia delante, empujándonos a estudiar territorios inexplorados y crecer. El Nodo Sur atenúa las cosas, reduciéndolas a la esencia misma de su existencia. Esta energía nos pide que nos deshagamos de lo que se ha acumulado. Considera el Nodo Norte como inflado, lleno de potencial y ansioso por madurar. Por el contrario, considera el Nodo Sur como desinflado, con lecciones más condensadas; su trabajo está completo en gran parte.
Cuando los nodos lunares estaban en Géminis y Sagitario (2020-2022) teníamos restringido el movimiento, particularmente en la movilidad internacional (Nodo Sur en Sagitario). Durante los últimos 18 meses, los nodos han estado en el eje Aries/Libra. Hemos visto más energía de Aries (autoafirmación, conflicto y guerra) y menos energía de Libra (diplomacia, cooperación y paz).
Entonces, ¿qué podemos esperar del Nodo Norte en Piscis y del Nodo Sur en Virgo? ¿Cómo este nuevo eje nos desafiará a recalibrar nuestro enfoque y hallar el equilibrio? Con el Nodo Norte en Piscis, nos sentiremos atraídos a profundizar. De verdad queremos entender: ¿qué hay detrás de todo esto? Solo porque algo no exista en forma tangible no significa que no exista. La búsqueda de respuestas más allá de lo que es visible o ponderable es un aspecto fundamental del Nodo Norte en Piscis. El Nodo Sur en la practicidad de Virgo nos conectará a tierra, y nos recordará que debemos construir los peldaños para que realmente podamos llegar a esos destinos místicos.
Tan pronto como el Nodo Norte entre en Piscis, forma una conjunción con Neptuno. El Nodo Norte y Neptuno se encontrarán en una conjunción exacta el 7 de febrero de 2025 a 28 grados en Piscis. El Nodo Norte representa un deseo profundo de respuestas. Con el Nodo Norte y Neptuno, nos inspiraremos para embarcarnos en un viaje para buscar algo que aporte un significado más profundo a nuestra existencia. Sin embargo, dado que Neptuno es un planeta exterior e inherentemente esquivo, también podríamos sentir incertidumbre. Pero, si podemos trascender dicha incertidumbre, el Nodo Norte en conjunción con Neptuno tiene el potencial de despertar algo profundo dentro de nuestra alma: un profundo anhelo de conexión y un reconocimiento de que tenemos un propósito superior que espera ser cumplido.