Esta semana marca una profunda transición desde la ardiente expansión de Sagitario a la estructura sólida de Capricornio. Tras unos días llenos de movimiento e inspiración, la energía comienza a estabilizarse, lo que nos impulsa a plasmar nuestras visiones en forma tangible.
El 15 de diciembre, Marte entra en Capricornio, amplificando la determinación y la concentración. Marte, planeta del impulso y la acción, se exalta en Capricornio, lo que significa que su energía se vuelve más estratégica, estable y productiva. Este tránsito nos ayuda a actuar con determinación, construir con paciencia y perseguir nuestros objetivos con claridad y disciplina.
La Luna Nueva en Capricornio, que tendrá lugar el 20 de diciembre, coincide con Rosh Jodesh Tevet, lo que marca el comienzo de un nuevo ciclo lunar que nos invita a plantar semillas de responsabilidad, madurez y estructura espiritual. La energía de Capricornio nos recuerda que la manifestación requiere persistencia e integridad, transformando la visión en algo duradero y real.
Aunque el ciclo lunar abre las puertas de Capricornio, el Sol no entrará en Capricornio hasta el 21 de diciembre, manteniéndonos en el umbral entre el optimismo de Sagitario y el realismo de Capricornio. Esta transición forma un puente sagrado: la fe que nos inspira y la estructura que nos sostiene.
Durante la luna menguante (del 11 al 20 de diciembre), seguimos liberando y limpiando lo que ya no nos sirve, dejando espacio para nuevos comienzos. Mientras tanto, Júpiter en Cáncer y Saturno y Neptuno en Piscis preservan la profundidad emocional y la fe espiritual, recordándonos que el éxito solo cobra sentido cuando está impregnado de compasión y un propósito superior.
En el corazón de esta semana brilla Janucá, la Fiesta de las Luces. Astrológicamente, su mensaje se alinea maravillosamente con la Luna Nueva: ambos simbolizan el renacimiento de la Luz en medio de la oscuridad. Se trata de una invitación sagrada a reavivar nuestra llama interior, renovar nuestra fe y comprometernos con acciones que manifiesten la Luz con coherencia y corazón.
En resumen: con Marte y la Luna Nueva en Capricornio, y la iluminación de Janucá, esta semana nos llama a construir con intención. Es hora de convertir la inspiración en estructura, la fe en esfuerzo y nuestro fuego interior en una Luz constante que pueda guiar y elevar a los demás.